martes, 28 de febrero de 2017

Sencillamente es mi prioridad



Decía Coco Chanel que “el acto más valiente que una puede hacer es pensar por sí misma en voz alta” y también que “para ser irremplazable, una tiene que buscar ser diferente” Y digo yo ¿diferente a qué?, ¿a quién? y ¿cómo se consigue eso?
Inspiradas por estos consejos de la costurera parisina, Susana Martínez como dramaturga y yo misma, como directora, hemos creado “Yo soy Coco”. Una propuesta que ha nacido para hablar de la joven Gabrielle, hoy más conocida como Coco Chanel. Pero… ¿Cómo se llega a ser lo que se desea ser? ¿Y cómo conseguir ser sencillamente una misma?

Considerando que actualmente, tampoco estamos en un paraíso de igualdad real, en cuanto a oportunidades o en cuanto a la libertad para decidir (ojalá pudieran contarlo las mujeres brutalmente asesinadas) Susana y yo hemos intentando entender por qué Coco consiguió hacer lo que hizo y qué le supuso hacerlo.

Cuanto más estudio a personas que me interesan, mayor es mi afán de dar a conocer, en profundidad, a las mujeres que han participado activamente en la historia de la humanidad. Hay escasa información sobre cómo vivieron su vida y por qué consiguieron cambiar desde su propia realidad, la de otras mujeres. A veces, la impresión es que sólo se conoce el resultado final de lo que alcanzaron y nada, o muy poco, de lo que significó su proyecto. Es necesario que se conozcan las experiencias de todas las mujeres que intervinieron social, política y artísticamente. Que se hable de ellas en los centros de enseñanza, desde la labor periodística, o través de la creación de proyectos audiovisuales y escénicos.

Para hablar de estas mujeres, sencillamente, resta centrarse en qué carácter, bueno o malo, tuvieron y si amaron poco o mucho y a quién. Es necesario rescatarlas por sí mismas y en voz alta. Pero esto no pretende ser un alegato, simplemente es mi prioridad a la hora de seguir creando. Porque he echado de menos, en los libros de texto, en los que estudié y en los que sigo aprendiendo todavía, a las mujeres. Las que he ido descubriendo se me han ido apareciendo por la necesidad de encontrarlas. Mujeres borradas, acalladas, suplantadas y muchas veces olvidadas, pero también al contrario, muy conocidas pero lamentablemente estereotipadas, prejuiciadas o desprestigiadas por el simple hecho de ser diferentes. Mujeres, muchas veces, sólo iconos de sensualidad, de belleza o de subversión y disonancia.

Con Yo soy Coco, segundo trabajo de la Plataforma Actrices para la Escena, nos atrevemos con otra aventura teatral pero muy diferente a “Reinas”. Pensada desde nosotras mismas y en voz alta. Es curioso, tal vez consigamos llegar, incluso, a ser un poco diferentes.

Vaya por delante todo el miedo del mundo, porque siempre es una gran responsabilidad trabajar en las artes escénicas. Porque no sólo es un compromiso con nuestro oficio, o con la memoria histórica de las mujeres, es una vez más, una obligación con el público, con ese “imprescindible” capaz de llenar los teatros.

1 comentario:

  1. Palabras geniales , propias de una "genia" como tú.
    Estoy deseando ver tu Coco .
    Un besico .

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